jueves, 30 de agosto de 2007

Fin de semana 6 (I): del 24 al 27 de agosto

DESTINO: Santiago, Valparaíso y Viña del Mar

Este ha sido otro fin de semana largo, de esos en los que mordemos el final de una semana y el principio de otra para alcanzar a ver más. Nuestro alojamiento de cinco estrellas. No un hotel. Mucho mejor. Estuvimos en casa de los padres de Irma, una profesora del Instituto de Estadística. Nos dejó su estudio en el último piso de la casa de sus padres: una habitación muy amplia con dos camas y un baño y cocina privados. Y un ventanal con unas vistas que inspiraban vacaciones de verano.


La mesa de desayuno en el estudio, preparada por los padres de Irma





Valparaíso: Recorrimos Valparaíso el sábado y el domingo con un guía excepcional: Don Quintín (el padre de Irma) que, a sus 84 años, parecía estar menos cansado que nosotras al final del día. Pero antes de llegar al final del día, tenemos que empezarlo. A las nueve de la mañana nos dirigimos con una micro desde el Cerro Bellavista, donde estaba la casa, hacia Playa Ancha. Es un barrio residencial donde hay varios edificios de Universidades (la de Chile y la de Valparaíso).






Colores en Playa Ancha




Valparaíso tiene 44 cerros y 15 ascensores activos (con diferentes nombres) que hacen las subidas más livianas a autóctonos y turistas.




Ascensor Artillería (creo que ése es el nombre)





Es una ciudad en la que hay poesía en cada rincón, el Cerro Bellavista tiene lo que se conoce como el "Museo a Cielo Abierto" que no es más que la decoración de las calles, de las escaleras, de las paredes. ¡Y mira lo que encuentro en algunas paredes! ¡Versos de Federico García Lorca!
















El primer cerro que visitamos fue el Cerro Alegre, uno de los más típicos y visitados, subimos las escaleras en lugar de coger el Ascensor El Peral. Arriba nos encontramos con el Museo de Bellas Artes (Palacio Baburizza). Aunque estaba cerrado, solo la casa ya tiene encanto. La que no estaba cerrada era la Casa Museo de Renzo Pecchenino “Lukas”, un periodista y dibujante italiano que vivió en Valparaíso desde pequeño. Lukas dibujaba tiras humorísticas para varios diarios.





Palacio Baburizza





El ascensor del Cerro Artillería nos llevó hasta el Paseo 21 de Mayo y admiramos la ciudad desde el mirador. Allí mismo está el museo Naval. En esta ciudad hay mucha presencia de las fuerzas navales ya que Valparaíso es el principal puerto de Chile.






Museo Naval y Marítimo





Sí, soy una turista más, pagué los 1000 pesos encantada por tener una foto con una llama.
La razón de que tenga la boca así es porque hacía un segundo la llama se estaba acercando como si me diera un beso pero al final ¡tuvo que dejarme mal!





Además de cerros y casas típicas de colores Valparaíso tiene algunas plazas muy imponentes en el Plano. Por ejemplo: la plaza Sotomayor con el edificio de la Armada de Chile (antigua Intendencia Naval) y el Monumento a Los Héroes del Combate Naval de Iquique durante la Guerra del Pacífico. La figura de Arturo Prat corona el monumento y está rodeado de otros marinos que lo acompañaron en el abordaje de la nave Huáscar el 21 de Mayo de 1879. Bajo su pedestal está la cripta donde se guardan los restos de Prat y a los pies se encuentra la losa que con una llama.




La sede de la Armada de Chile y el monumento en la Plaza Sotomayor.




La losa. Muy patriótico, sobre todo la última frase



Cerca de la plaza Sotomayor encontramos un mercado. En un piso estaba las cocinerías, restaurantes que preparan menús baratos, en otro piso las paradas. En una de ellas, estaba esta gata vigilante:




El domingo por la mañana fuimos a La Sebastiana, Casa Museo de Pablo Neruda, situada en el Cerro Bellavista. El nombre se debe a su arquitecto, el español Sebastián Collado y al parecer pretende recoger la esencia de Valparaíso: una casa con zonas angostas, con muchas y estrechas escaleras…



De hecho, el mismo Neruda describe Valparaíso así:





Valparaíso qué disparate eres,
qué loco puerto loco
qué cabeza con cerros desgreñada,
no acabas de peinarte nunca,
tuviste tiempo de vestirte
siempre te sorprendió la vida
te despertó la muerte en camisa,
en largos calzoncillos…
Pablo Neruda







En la casa se encuentran todo tipo de objetos que Neruda coleccionó a lo largo de su vida: botellas de todos los colores y formas, platos con dibujos de viajes con globos aerostáticos, un caballito de carrusel… Algunos amontonamos trastos, los genios en cambio atesoran fetiches. Al margen de la broma, la casa es una maravilla. Me encantó su estudio y la barra de bar. El primero era donde escribía, está en el último piso y parece que esté en el vacío porque sobresale bastante de toda la estructura de la casa, y las paredes son acristaladas. Da la sensación que los cerros y las casas que motean las laderas te arropan. La barra de bar también me gustó mucho. En la casa explicaban que Pablo era el único que podía ponerse detrás de la barra y decía algo así como que prohibía a sus visitas tratar temas importantes y con inteligencia, sólo se podían decir tonterías, por ejemplo se dedicaban a forzar que los poemas rimaran cambiando los acentos de la última palabra de cada verso.






El bar



Botellas de Neruda



Por último, antes de volver quisimos ver el Congreso de cerca. El Congreso Nacional de Chile no está en Santiago, en 1990 se trasladó a Valparaíso. El edificio, diseñado por unos arquitectos chilenos, se empezó a construir en 1988 (año en que el Plebiscito Nacional dio por terminado el gobierno de Pinochet que empezó con el golpe de estado del 11 de septiembre de 1973). El edificio es enorme: 60.000 metros cuadrados y en su construcción se necesitaron 26.000 metros cúbicos de hormigón armado y a mi me personalmente no me acabó de gustar. Lo veo moderno pero con ansias de parecer antiguo, pero impresionar impresiona ¿por qué negarlo?

Acabamos la tarde del domingo montando en triciclo por los Jardines Italia. Conducir estos artilugios parecía más fácil de lo que en realidad era, estuve a punto de arrollar a algún que otro perro o carrito de dulces.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué envidia me das!!!

Anónimo dijo...

mi reloj marca las 11'11!! :)

Anónimo dijo...

Un fin de semana largo, sí, pero muy bien aprovechado como los otros tantos que habéis pasado.

Ya lo hablamos el tema de que la gente de allí son muy hospitalarios, y no saben decir que NO, ahí tenemos la prueba, una chica que conocéis, si se puede decir conocéis, os ofrece su habitación en casa de sus padres.

Lo del beso con la llama (ya hablaré yo con ésta!! ;)... ) no se yo si tenía la intención de beso, las llamas cuando ponen ese morro es que quieren escupir, creo que mejor que te quedaras con las ganas, así estas más wpa.

Mi reloj no marca las 17'11 pero considero que es un buen número ese...

un bso

Anónimo dijo...

Vaya Vaya con los viajes son verdaderamente interesantes, ademas con un guia personal es todo un lujo que pocos se pueden permitir, osea estupendo.

Este blog hay que hacer un dossier y entregarlo a los interesados por un modico precio.

El consulado de Chile también esta interesado en este blog.

Como dice Ruben la hospitalidad de estas personas es digna de elogio.

La madrina dice ya esta, ya esta


Un beso fuerte